14 noviembre, 2005

Quedan lagunas de Franco por desvelar


Preston cree que quedan lagunas de Franco por desvelar

El historiador e hispanista británico Paul Preston ha señalado hoy en Barcelona que treinta años después de la muerte de Francisco Franco quedan todavía muchas lagunas en la historiografía sobre el dictador, como su vida íntima o la «corrupción» de su entorno familiar.

Preston, que ha participado en una mesa redonda dedicada a la figura de Franco en el Salón del Libro de Barcelona, ha advertido asimismo: «tampoco sabemos su pensamiento en relación al Vaticano, si realmente estaba convencido cuando decía que Pablo VI era criptocomunista o que Juan XXIII era masón».

A su juicio, aún se deben hacer estudios profundos sobre toda la corrupción que había en el país y la participación de familiares de Franco en la misma.

Autor de una biografía de Franco y de numerosos libros sobre la guerra civil española, el historiador inglés piensa que «atribuir la palabra idea o ideología a Franco sería injusto, porque era un hombre más bien tonto, como queda demostrado cuando decía que todo el mundo estaba mandado por un estado supermasónico, que no estaba ni en Washington ni en Moscú».

La ideología central de Franco, ha matizado Preston, es que «los españoles son unos niños traviesos a los que les hacía falta un padre autoritario y justo, una figura paterna que precisamente él echó en falta en su familia».

Preston ha replicado las palabras recientes del historiador Ricardo de la Cierva, quien manifestó que «Franco no era dictador y que no quería en ningún momento el poder», unos términos que le parecen «ridículos», pues, a su juicio, «el dictador se dedicó toda su vida a obtener el poder». Justamente, añade, para mantener el poder el caudillo se mostró siempre «muy flexible ideológicamente, pues prefirió cambiar de idea constantemente antes que perder el poder, mientras que Hitler prefirió destruir el país, Alemania, antes que cambiar de ideas».

Sobre la manía persecutoria que Francisco Franco dispensó a los masones, Preston cree que «seguramente provenía de la relación conflictiva que tenía con su padre, quien tenía relaciones con gente de la masonería, aparte de que era un hombre que bebía y era mujeriego.


http://www.diariodeleon.es/se_cultura/noticia.jsp?CAT=114&TEXTO=4248551