La masonería alcanza su punto álgido en la Marina Alta con la existencia de 7 logias

La presencia de residentes ingleses en Xàbia convierte a la comarca en referente de templos masónicos en la Comunitat. Una asamblea en Dénia eligió al Gran Maestro de Valencia
Arturo Ruiz, Dénia

La presencia de la masonería ha alcanzado su punto más álgido en la Marina Alta, y sobre todo en Xàbia, gracias a la notable presencia de residentes ingleses. De hecho, en la actualidad existen 7 logias en esta comarca y 150 hermanos de un total de 400 implantados en lo que los masones consideran la provincia de Valencia, que engloba en realidad a toda la Comunitat. Aproximadamente 2.200 hermanos forman parte de la Gran Logia de España. Un buen ejemplo de la importancia que ha cobrado la masonería en la Marina Alta, comparable sólo en el territorio autonómico a la zona de Torrevieja, es que el pasado sábado 29 de abril se celebró en el hotel Marriot de Dénia la instalación del Gran Maestro Provincial, Óscar de Alfonso Ortega, esto es, el acto de investidura de la persona que dirigirá los destinos de los masones valencianos durante el próximo año. De Alfonso ya desempeñó este cargo en 2002 y en 2003. Durante la reunión también estuvo presente el nuevo Gran Maestro de la Gran Logia de España, José Carretero Doménech. De Alfonso explicó que «la importancia de la masonería en la Marina Alta estriba sobre todo en la presencia de jubilados ingleses que bien ya pertenecían a logias masónicas cuando vivían en Inglaterra o bien buscan una forma de relacionarse aquí integrándose en la institución». Las logias que se reúnen en la comarca son Javea 40, Sprig of Acacia 43, Euromason Costa Blanca 5, Puerto de Xàbia 58, Arenal 65, Deportiva 83 y Marina Alta 144. A cada nombre le sigue un número que corresponda al ordinal del registro de la Gran Logia de España. La de Euromason Costa Blanca es de alemanes y las otras de ingleses. A pesar de esta importancia presencia foránea, la Gran Logia de España es soberana de la de Inglaterra o de la de Francia. En ese sentido, cada país tiene una sola gran logia regular. A su vez, los masones españoles están divididos en provincias que en ocasiones corresponde a un territorio autonómico, como sucede en la Comunitat, en Cataluña o en Andalucía y en otras a varias autonomías como la de Castilla. Existen también los denominados legados territoriales, zonas que no tienen suficientes hermanos para convertirse en provincias, como sucede en el País Vasco o en Galicia. Toda esta estructura organizativa es «regular» porque «cumple los principios ancestrales de la masonería y por lo tanto se diferencian de otras organizaciones minoritarias e irregulares que no lo hacen».Precisamente, una revisión a esos requisitos corrige múltiples tópicos con los que la sociedad siempre había encasillado la actividad de las logias. Por ejemplo, la masonería no es anticlerical: por el contrario, uno de sus principios obligatorios es que cada sus miembros debe creer en Dios o en algún ser supremo erigido como gran arquitecto del universo. Ahora bien, la tolerancia religiosa es absoluta y en las logias son aceptados católicos, protestantes, judíos, musulmanes, hindúes o integrantes de cualquier otro credo. Por eso, el centro de sus rituales gravita siempre sobre un volumen de la ley sagrada, ya sea la Biblia, el Corán o la Tora. De ahí que, al contrario de lo que han repetido numerosos historiadores, no existan conflictos con la jerarquía católica o con el Opus Dei, por poner dos ejemplos. Ahora bien, lo que los masones no aceptan son ateos. Tampoco se aceptan mujeres «ya que debemos respetar la tradición histórica medieval que hemos heredado y que no podemos cambiar aunque evidentemente nos pese o se pueda ver como algo machista». De Alfonso también desmiente que los masones hayan pertenecido a lo largo de su historia a ideologías revolucionarias o relacionadas con la izquierda. «Se aceptan masones de cualquier origen político y en las logias españolas ha habido monárquicos y republicanos de la misma manera que en la Guerra de la Independencia de los EEUU hubo hermanos de la misma logia que bien eligieron el bando de Washington o el del rey británico y combatieron entre sí». Es cierto que los regímenes totalitarios, desde la Alemania nazi a la URSS de Stalin pasando por la conocida obsesión de Franco intentaron perseguir a los masones ya que «no los podían controlar». «Pero en los templos está prohibido hablar de política como también de religión». De hecho, otra de las piedras angulares de los principios masónicos es la «idea de progreso y libertad que puede ser aceptada por cualquier ideología». La masonería está regulada por un comportamiento ético, «el de ayudar siempre a los individuos y hacerlos mejor personas». Por eso, si un hermano es condenado judicialmente por un delito doloso se le expulsa, aunque una vez que haya cumplido su pena puede volver a ser aceptado. Tampoco se permite que un hermano haga negocios a través de la logia. Esos principios morales se podrían resumir en la caridad hacia los no masones y la solidaridad y fraternidad entre ellos. Para aplicarlos adquieren una gran importancia los símbolos, «instrumentos que nos permiten mejorar nuestro entorno personal ; esos rituales nos ayudan a reflexionar sobre el mundo en el que vivimos. Se trata de mejorar al individuo que es mejorar la sociedad, aunque sin influirla». Para ingresar en una logia hace falta una serie de requisitos pero una vez que una persona se ha integrado en ella «es hermano para toda la vida». De Alfonso asegura que no existen exigencias sociales ni culturales ni mucho menos es necesario tener un gran poder adquisitivo. «Estar en la logia no es caro, la cuota viene a suponer unos 300 euros al mes». En la actualidad, la masonería vive momentos álgidos, en especial en comarcas como la Marina Alta con una gran presencia de foráneos, e intenta abrirse a la sociedad. Así, quienes estén interesados pueden dirigirse a la dirección de correoprovincialsec@hotmail.com (que es el email del Secretario en la Provincia) o al teléfono 933025991, que es el teléfono de la Gran Logia de España en Barcelona.


Fuente:
http://www.levante-emv.com/secciones/noticia.jsp?pIdNoticia=195688&pIdSeccion=17&pNumEjemplar=3145



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