15 octubre, 2009

Prepara la Gran Logia de Cuba celebraciones por sus 150 años de existencia

Gustavo E. Pardo Valdés
Presidente de la Academia Cubana de Altos Estudios Masónicos

LA HABANA, Cuba, octubre, (www.cubanet.org) -La Gran Logia de Cuba fue fundada en la ciudad de Santiago de Cuba el día 5 de diciembre de 1859, bajo la denominación de Gran Logia de Colón.

Desde sus inicios esta institución tuvo una participación relevante en la historia de Cuba, resultando reconocida por el Primer Congreso de Historia, efectuado en La Habana en el año 1942, como “la Institución que más elementos ha aportado a la independencia, la libertad, la cultura y el progreso de Cuba, tanto desde el punto de vista ideológico, como por el ejemplo de sacrificio, heroísmo y perseverancia ofrecido por sus afiliados para dar a Cuba, una vida de decoro humano, de igualdad y fraternidad social, y un régimen de sana democracia”

Con fecha 20 de mayo de 2009 el Muy Respetable Gran Maestro José Ramón González Díaz, emitió la convocatoria para Evento Masónico Internacional “MASONERIA EN EL SIGLO XXI”, con motivo de la conmemoración del 150 Aniversario de la Fundación de la Gran Logia de Cuba de A.L. y A.M., en el cual invitaba “a los masones que se encuentran esparcidos desde Oriente a Occidente a compartir junto a nosotros tan alta efeméride que es la celebración de todos los librepensadores”.

Las actividades programadas se desarrollarán en La Habana, del 3 al 5 de diciembre de 2009.

Como parte de las celebraciones se efectuará el Coloquio “Masonería en el Siglo XXI” en los salones del Hotel Nacional, en el que se tratarán los temas:
“Informática, información y masonería”,
“La educación masónica y su influencia en las nueva generaciones”, y
“Masonería y Sociedad en el Siglo XXI”.

La culminación de todas las festividades será a las 8:00 PM del día 5, en el Gran Salón de Actos “Benito Juárez”, con capacidad para unas 800 personas sentadas.

En el paquete turístico que se ofrece a los visitantes extranjeros, se incluye la participación en la “Ceremonia del Cañonazo”, y una cena en un restaurante del Complejo Turístico “Morro-Cabaña”. Esto ha originado que masón grado 33, y ex preso político Ángel Pardo Mazorra, Venerable Maestro de la Benemérita Logia “Mártires de la Cabaña”, perteneciente a la Federación de Masones Exiliados Cubanos, “Cuba Primero”, haya dirigido una carta de protesta al Muy Respetable Gran Maestro José Ramón González Díaz.

En esta misiva, fechada en Miami el 30 de agosto de 2009, expresa la consternación de los miembros de la antes referida Logia, por haber sido incluido en el paquete turístico del evento, “la Ceremonia del Cañonazo, seguido de una cena en la tristemente célebre Fortaleza de la Cabaña, donde miles de nuestros compatriotas y hermanos fueron fusilados al grito de Viva Cuba Libre, Abajo el Comunismo y muchos fuimos victima de maltratos crueles, inhumanos y degradantes”.

La Federación de Masones Cubanos Exilados “Cuba Primero”, radicada en Hialeah, Florida, proclama que su “misión en la Masonería es velar por los intereses de la humanidad y el cumplimiento del tríptico Masónico, de Libertad, Igualdad y Fraternidad, símbolos universales de la Fraternidad Masónica”.

Con posterioridad, la Gran Logia de Cuba ha aclarado que estas actividades se efectuaran en un complejo turístico denominado “Morro-Cabaña”, y no específicamente en la antigua fortaleza de la Cabaña.

El costo del paquete turístico para los participantes en el Evento, y acompañantes oscila entre $713,00 a $981,00 USD. Las personas que no deseen acogerse al paquete de servicios de alojamiento, excursiones y traslados ofertados, deben pagar $240,00 USD.

Originalmente se estimaba en unas 79 u 80 personas las que participarían en estas actividades, pero según los últimos informes recibidos, actualmente se espera que asistan unas 200 y 250 personas, entre masones y acompañantes.


Fuente:
http://www.cubanet.org/CNews/y09/octubre09/15_C_6.html

13 octubre, 2009

¿Por qué Francisco Ferrer Guardia ?


"La respuesta es clara. Porque Ferrer murió el 13 de octubre de 1909 como un mártir de la libertad de consciencia. Murió porque había sido el creador de la Escuela Moderna y porque la renovación de la enseñanza que promovía implicaba la emancipación de los hombres y las mujeres, hacerlos conscientes de su dignidad como tales y, por lo tanto, ciudadanos dispuestos a luchar para salir de la miseria y la sumisión."
La obra de Ferrer merece ser recordada. Su muerte merece ser homenajeada.

Los detractores de Ferrer nos dan los principales argumentos que justifican hoy su recuerdo. Dicen de él que era un anarquista, un anticlerical, un masón y un antinacionalista. Cada una de esas acusaciones forma parte de las virtudes del personaje.

En primer lugar, Francisco Ferrer no era anarquista. Al comienzo de su vida comparte las ideas republicanas y hacia el final adopta un pensamiento decididamente libertario. Como ha puesto de manifiesto Baltasar Porcel : ¿cómo podía un hombre justo no ser libertario a principios de siglo, en el marco de una situación social escandalosamente injusta, con jornadas laborales de 66 horas de trabajo a la semana y unos salarios de miseria ?

También dicen que Ferrer era anticlerical. En verdad, era enemigo de una Iglesia comprometida y aliada del poder político, opuesta a cualquier cambio social. Una Iglesia que muchos cristianos de hoy consideran indigna de su papel. Ferrer era un laico, un humanista que creía en el hombre como centro de todas las cosas y que propugnaba el libre examen, la capacidad de cada hombre de buscar individualmente la verdad sin imposiciones exteriores.

La tercera acusación es que Ferrer era masón. Y es verdad, fue iniciado en la Francmasonería y desplegó una intensa tarea en las logias españolas y francesas de la época. Fue francmasón como tantas otras mentalidades renovadoras de su tiempo : Anselmo Lorenzo, Rosend Arús y Odón de Buen, o tal y como me decía el otro día Josep Maria Ainaud de Lasarte lo fue su abuelo, Josep Maria de Lasarte, y como lo sería tiempo después el Presidente mártir de la Generalitat de Catalunya, Lluís Companys. Ferrer fue, efectivamente, francmasón, es decir un librepensador que quiso dedicarse a la tarea más sublime, la de enseñar a los demás a pensar, a ser ciudadanos libres.

Y, finalmente, dicen algunos de Ferrer que no era nacionalista, que no era catalanista, que no era de los "nuestros" y que sería necesario borrarle de la Historia de Cataluña. Ferrer, efectivamente, no era catalanista, era un internacionalista, un hombre para el cual todos los problemas de la humanidad eran propios, que creía que un país no puede vivir feliz si en otros se vive bajo la esclavitud y la miseria. En definitiva, un hombre hermano de todos los otros seres humanos. Y un hombre como este no podía identificarse con los estrechos puntos de vista de la derecha catalana, preocupada por sí misma y cerrada en su provincialismo. Los que niegan al hijo de Cal Boter la condición de catalán se niegan a si mismos y demuestran que su catalanismo no es voluntad de construir un país para todos, sino de construir un país que se convierta en su tienda particular.

Es, pues, esta figura de Francisco Ferrer Guardia, libertario, laico, librepensador y internacionalista, la que hay que reivindicar hoy.

Palabras de Joan-Francesc Pont y Clemente, Presidente de la Fundación Francisco Ferrer y Guardia, pornunciadas en el homenaje realizado en Barcelona en 1989 : Ferrer i Guàrdia al Saló de Cent


Fuente:
http://www.rojoynegro.info/2004/spip.php?article28248